14 feb 2012
CARACAS.- La temporada de Rényel Pinto en Venezuela fue sencillamente impresionante: 6-1, con 2.43 de efectividad en 13 aperturas (77.2 IL). El dominio fue tal que, aunque no consiguió una buena oferta para el beisbol organizado, sí abrió los ojos del competitivo y bien pagado beisbol japonés.
El zurdo exgrandeliga ha mantenido la bola bajita por aquellas tierras. En sus primeras sesiones de bullpen solo se desprenden comentarios positivos desde el cuerpo técnico de los Halcones del Softbank, campeones nipones, que buscaron fortalecer su staff de pitcheo con piezas como Bard Penny y la ofensiva con el dominicano Wily Mo Peña.
El legendario Sadaharu Oh, mánager de los emplumados, ya ha visto una pequeña parte del potencial del de Cúpira.
El legendario Sadaharu Oh, mánager de los emplumados, ya ha visto una pequeña parte del potencial del de Cúpira.
"Es mejor de lo que pensaba, su recta se mueve muy bien", declaró el veterano a la página web del equipo luego de verlo lanzar su envío rápido y el resto de los pitcheos que conforman su repertorio, como la curva, el cambio de velocidad y la slider.
El domingo Pinto tuvo un juego simulado en el complejo primaveral del Softbank, en la localidad de Miyazaki, en el que enfrentó a 10 bateadores. Ninguno le pudo conectar imparable y siete de ellos fueron guillotinados. Por los momentos, el criollo está en los planes de ingresar a la rotación en el equipo de Álex Cabrera. "Su recta echa humo, y su curva te saca de paso", dijo Yuichi Honda, camarero titular de los monarcas tras poncharse.
Pinto tuvo una tarde dominante como ya ha acostumbrado y además pudo celebrar doblemente tras la llegada ese día a Japón de su esposa Jéssica.
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